Descripción
La obra se desarrolla con elementos simbólicos potentes. En el centro de la composición, un hombre es atravesado por un cuchillo sostenido por una mano gigante, simbolizando vulnerabilidad y agresión. Justo debajo, otra mano gigante sostiene un tenedor, apuntando hacia una cabeza con expresión de terror, evocando el tema del poder y el control en una escena de intimidación. Además, un cocodrilo con fauces abiertas agrega una capa de peligro y voracidad al ambiente.
La obra, juega con contrastes y metáforas visuales para explorar temas universales como la dominación, el miedo y la ansiedad. Cada elemento en la composición invita a la reflexión sobre las complejas dinámicas de poder y la vulnerabilidad humana frente a fuerzas externas.